Los clubes de lectura son una oferta de ocio en pleno auge, tanto que la propia industria ya reconoce que son parte fundamental de la estrategia de promoción de un libro. Sin embargo, todavía quedan rincones que el marketing y el estilo de vida acelerado todavía no han sido capaces de corromper. Por qué, ¿y si te decimos que hay un club de lectura en Venice, California que lleva, literalmente, 30 años leyendo el mismo libro? Con 628 páginas, 'Finnegans Wake' es la obra más ambiciosa, extraña y compleja de James Joyce. Escrita en 1939, la idea central de la novela es que la historia es cíclica pero lo verdaderamente importante no se encuentra tanto en su trama como en estilo experimental en el que está escrita. Por un lado, fusiona la realidad con el mundo onírico y, por otro, está llena de juegos de palabras, dobles sentidos, neologismos y otras incrustaciones de otras lenguas y jergas. Resumiendo: no es ni una lectura corta ni una lectura fácil. De ello puede dar buena cuenta "el grupo de lectura Finnegans Wake de California" que, después de 28 años, por fin puede decir que ha concluido la obra. Empezaron en 1995 como un grupo de entre 10 y 30 personas que se reunía cada mes en la biblioteca para discutir dos páginas del libro. No obstante, este ritmo resultó ser demasiado intenso para un texto tan denso y sin sentido. El grupo decidió entonces reducir la lectura a solo una página. Con los años, de la biblioteca pasaron a las videollamadas de Zoom. Algunos miembros pasaron de ser cuarentañeros a septuagenarios en el proceso y, en octubre de 2023, este club de lectura finalmente leyó la última página de la novela de Joyce. Lo más curioso es que este club de lectura ha tardado más en leer el libro de lo que el propio autor tardó en escribirlo. Esto es algo que le llevó once años menos al irlandés porque, mientras el club de lectura se ha tomado 28 años para saborearlo y entenderlo, a Joyce "solo" le llevó 17 años escribirlo. Hay que tener en cuenta que se trata de un libro que da mucho sobre lo que hablar, pues existe un amplio debate incluso sobre cosas tan básicas como dónde se desarrolla la novela o quiénes son el narrador y los personajes. Sin embargo, si hay una conclusión que han sacado después de tanto tiempo dedicado a 'Finnegans Wake' es que su lectura no termina nunca, literalmente. Esto se debe a que la última frase del libro queda a medias y continúa al principio de la novela. Es decir, el propio libro es cíclico. Así que, en noviembre, un mes después de haber concluido la lectura, el grupo la reanudó de nuevo dispuestos a leer el mismo libro para siempre.