Poeta, escritor, académico, funcionario público, educador, historiador, abogado, diplomático y secretario de Educación Pública y de Relaciones Exteriores, Jaime Torres Bodet se quitó la vida el 13 de mayo de 1974, cuatro días después de haber terminado de escribir el último tomo de sus memorias. Nació en la Ciudad de México el 17 de abril de 1902. Poeta, narrador y ensayista. Estudió en la Escuela Nacional de Jurisprudencia y en la Facultad de Altos Estudios de la Universidad Nacional. Fue profesor y secretario de la Escuela Nacional Preparatoria; profesor de la Facultad de Altos Estudios de la Universidad Nacional; secretario del rector José Vasconcelos; codirector de La Falange y Contemporáneos; secretario de las delegaciones mexicanas en Madrid y París; jefe del Departamento Diplomático de la SRE; secretario de Relaciones Exteriores y de Educación Pública; representante mexicano en la reunión constitutiva de la Organización de Estados Americanos; embajador de México en Francia; director general de la UNESCO. Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, de El Colegio Nacional, del Instituto de Francia y del Mundo Latino. Colaboró en El Occidente. Premio Nacional de Letras 1966. Doctor honoris causa por las universidades de Alburquerque, Burdeos, Bruselas, La Habana, Lima, Lyon, Mérida, México, París, Sinaloa y del Sur de California. Jaime Torres Bodet fue autor de una obra imponente, singular, original e irrepetible; un prosista, ensayista y poeta eminente; un intelectual de intensa actividad cultural; un incansable promotor de la educación en México y del pensamiento democrático y social; un pensador “grande entre los grandes” por sus realizaciones e ideales; un hombre que se convirtió en libro, subrayan los académicos e investigadores participantes en la efeméride, quienes dan cuenta, además, de las aportaciones de Torres Bodet a la literatura, la educación y la jurisprudencia. “En todas las latitudes, en todos los climas, bajo todos los cielos, los hombres que escriben, piensan y enseñan deben procurar hacer de la paz y la libertad algo dinámico y sustantivo, y no situaciones de tímida estabilidad y de simple exclusión de la muerte y la servidumbre”, escribió Torres Bodet en Deber y honrar al escritor, su discurso de ingreso a la Academia, pronunciado en 1953.