Libros: Wisteria, novela sobre la nostalgia y los ciclos de la vida

foto-resumen

Un recorrido por la memoria, por el pasado de una mujer que reconstruye su historia a partir de las casas que ha habitado, da forma a la novela Wisteria, editada por la Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial (DGPFE) de la UNAM en su colección juvenil ilustrada Hilo de Aracne. Escrito por María Fernanda García, el título fue presentado durante la pasada Feria Internacional del Libro de Guadalajara, con la participación de la autora, la escritora Isabel Hion y Alicia Espinosa de los Monteros, subdirectora de Vinculación, Comunicación y Tecnología de la DGPFE. En la presentación, García expresó que, aunque la obra se basa en recuerdos personales, incluye un componente de ficción que vuelve al relato mucho más subjetivo y facilita que el público conecte con la historia. “Escribir este libro me permitió dar forma a mi propia narrativa, especialmente a los lugares donde crecí. Fue un ejercicio de imaginar y reinterpretar lo que mis padres me contaron. Cada capítulo representa una etapa: nacimiento, infancia, adolescencia, adultez, todo ligado a espacios físicos”. El evento se desarrolló como una conversación amistosa en la que se compartieron los aspectos más conmovedores de la novela, la cual se enriqueció con la participación de estudiantes de bachillerato. Entre risas y reflexiones, los temas centrales de la obra hicieron eco en las experiencias de la audiencia, lo que confirmó, una vez más, cómo la literatura puede conectar generaciones y emociones en un mismo espacio. La autora, con amplia experiencia en literatura infantil, destacó que Wisteria es un libro breve capaz de “resonar entre lectores de distintas edades, porque la búsqueda de identidad es algo universal que no termina nunca”. También explicó que su intención fue escribirlo con un estilo íntimo, como si se tratara de una conversación entre personas muy cercanas. El texto está acompañado por las ilustraciones de Jimena Duval, arquitecta de profesión y quien, a decir de la autora, capturó perfectamente la esencia de la obra gracias a su enfoque profesional en la representación de espacios y casas habitación. Otro aspecto destacado por García fue la nostalgia que impregna a Wisteria. “El proceso de escribir este libro me ayudó a cerrar ciclos, a reflexionar sobre el paso a la adultez y a decidir qué cosas quería conservar de mi infancia”, aseguró.