Por Alejandro Vázquez Ríos Director del área de dirección de personal Los desafíos y los retos que vendrán en 2024, en el manejo de personas dentro de la empresa. Debemos partir de una realidad, el entorno laboral ha evolucionado y el 2024 no será la excepción. Hoy en día hablar del trabajo, es hablar de algo mucho más allá del puesto o la posición que una persona ocupa dentro de la organización, y será un año en el que las habilidades serán mucho más valoradas sobre los conocimientos técnicos. Esto obligará que las organizaciones y los directivos estén más enfocados en buscar gente habilidosa sobre gente, experta o especializada en alguna temática. Esto es positivo porque ayudará a seguir impulsando una agenda de prácticas de Universidad, equidad e inclusión dentro de las organizaciones, abriendo nuevas posibilidades hacia un tipo de candidatos que quizá no habríamos estado dispuestos a considerar. En el entorno de trabajo tendremos que mantenernos acostumbrados a vivir en tres distintos mundos: un mundo presencial, un mundo virtual y este mundo híbrido que llegó para quedarse. En primer lugar, aprovechando cada vez más la tecnología para acompañar a la gente que labor nuestra empresa, segundo perfeccionando y trabajando a mucho detalle en nuestros mandos, medios gente que es clave dentro de las estructuras para lograr aterrizar las estrategias que se definen desde la alta dirección, y en tercer lugar para potenciar la capacidad de nuestra gente mantenernos atendiendo y acompañando a nuestro personal en la atención a su salud. Otro tema que también llegó para quedarse y durante el 2024, habrá que darle un importante impulso a construir un ecosistema de trabajo, un ecosistema donde la empresa, los colaboradores y la sociedad estén alineados trabajando de manera integral para que este ecosistema se logre lo que necesitamos un interacción mucho más cercana entre la alta dirección y cualquier colaborador en la empresa. Esto con la finalidad de perseguir cuatro grandes objetivos. En primer lugar, generar un sentido autocrítico al interior de la empresa adaptados y adecuados. Son nuestros procesos de trabajo. En segundo lugar, acelerar la capacidad de aprendizaje e innovación en la empresa. Esto no se puede lograr si no construimos un ambiente saludable para toda persona que interactúa dentro de la organización y conjunto de estos tres grandes objetivos, nos ayudarán a que la experiencia de trabajo en la empresa se vuelva positiva la escasez de talento que viviremos el siguiente año nos obliga a generar esa experiencia positiva para quien ya es parte de la organización estos cuatro objetivos. definitivamente no se pueden lograr y quiero regresar al sentido autocrítico en la empresa, si no analizamos si la oferta o la propuesta que estamos haciendo como organización es suficientemente atractiva dados los cambios que hemos estado viviendo respecto a la demanda del mercado laboral, es así como las empresas tendrán que estar considerando y estudiando a mucho detalle la propuesta de valor que le hacen a sus colaboradores una propuesta que se constituye por cuatro grandes pilares. En primer lugar, qué tan adecuada es la oferta material que le hago a mis colaboradores, y esto va mucho más allá de la compensación. Hablamos de mis instalaciones, el espacio físico, la ubicación y la accesibilidad que ofrezco como organización y las herramientas que le ofrezco a mis colaboradores. Esto en su conjunto es lo que consideramos como oferta material. El segundo pilar de esta propuesta de valor al colaborador son oportunidades de crecimiento y desarrollo. El tercer pilar de esta propuesta de valor, la denominamos, conexión y comunidad. Finalmente el cuarto pilar lo definimos como significado y propósito de tantas acciones. Estoy llevando a cabo desde el alta dirección para compartir con mi personal el sentido mayor de existencia de la empresa que estamos buscando lograr para impactar social y comunitariamente como organización y como equipo de trabajo estos cuatro pilares que forman la propuesta de valor al colaborador serán un tema clave dentro del 2024. Sin duda el 2024 será un año desafiante, pero veámoslo desde un punto de vista positivo. Es un año que requerirá de alta dirección, poner recursos, asignar tiempo y dedicar esfuerzo para acercarse a la gente interactuar de una manera mucho más detallada, mucho más profunda, entendiendo sus necesidades para adaptar esta propuesta de valor y hacer que permanezcan trabajando en la organización.