Monterrey, Nuevo León, abril 7.- Para Jorge Garza Rodríguez, profesor investigador de la Escuela de Negocios de la Universidad de Monterrey, las perspectivas de la situación económica en México y, específicamente en Nuevo León, a corto y mediano plazos no son optimistas, ya que se espera que el PIB a nivel nacional no recupere su nivel anterior a la pandemia hasta el año 2024 o incluso después. “Es de esperar que el empleo y los salarios, principales determinantes de la pobreza laboral, se recuperen con poco dinamismo, lo que implicará que los niveles de pobreza laboral decrezcan lentamente en los siguientes años”, afirmó. Garza Rodríguez señaló que, mientras en el primer trimestre de 2020 había un millón de personas en Nuevo León cuyo ingreso laboral no era suficiente para cubrir el costo de la canasta alimentaria, solo seis meses después esta cifra se incrementó en 500 mil personas, afectando actualmente a millón y medio de personas. El catedrático destacó que, en una visión de más largo plazo, la pobreza laboral en Nuevo León no ha recuperado el nivel que tenía en 2005, ya que mientras que en el primer trimestre de 2005 esta tasa era de 14.3 %, en el tercer trimestre de 2020 prácticamente se duplicó, al alcanzar 27.9 por ciento de la población. Nueve puntos porcentuales de este fuerte incremento podrían atribuirse a la recesión económica provocada por el confinamiento y la caída de la demanda y de la oferta provocada por el COVID-19”, expuso. El doctor en Economía por la Universidad de Missouri-Columbia estableció que la disminución del empleo y de los ingresos impactó negativamente en los niveles de pobreza en el estado, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) correspondientes a Nuevo León. Agregó que, después de haberse registrado significativas disminuciones en la tasa de pobreza laboral desde el primer trimestre de 2018, en que este indicador alcanzó 25.2 %, hasta llegar a 18.6 % en el primer trimestre de 2020, la pandemia del COVID-19 provocó un fuerte repunte de más de 9 puntos porcentuales al tercer trimestre de 2020, situándose en 27.9 %. Entre las cifras de la ENOE para Nuevo León, según el catedrático, se destaca que en el tercer trimestre de 2020 la población desocupada en el estado aumentó 57 % con respecto al mismo período del año anterior. Garza Rodríguez hizo notar que, si bien el PIB, en el tercer trimestre de 2020, aumentó 12 % respecto al trimestre anterior, su nivel fue 8.6 % inferior al registrado en el mismo período de 2019. El profesor de la UDEM especificó que las cifras de la ENOE para el tercer trimestre a nivel nacional continúan mostrando una fuerte caída del empleo en comparación con las correspondientes cifras antes de que se presentara la pandemia: la población ocupada en el país en el período de julio a septiembre de 2020 fue de 51 millones de personas, 4.2 millones menos que en el mismo período de 2019. “Esta significativa caída de la actividad económica y del empleo ha provocado fuertes incrementos en la pobreza (…) las cifras son francamente desalentadoras”, expresó. Basado en datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (CONEVAL), Garza Rodríguez explicó que este indicador se incrementó de 38.5 % de la población en el tercer trimestre de 2019 a 44.5 % en el tercer trimestre de 2020, la tasa más alta desde el año 2005. “Este aumento representa un incremento de 11.6 millones de personas en situación de pobreza laboral en el país, para alcanzar ya a 57 millones de personas”, apuntó.