Ciudad de México, marzo 25.- La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) dio a conocer que sólo regresarán a clases presenciales cuando el semáforo epidemiológico se encuentra en verde y sus docentes ya hayan sido vacunados. La Universidad recalcó que las actividades presenciales no se van a reanudar hasta que hayan pasado diez días de que el semáforo local se encuentre en verde. Tras instalar la sesión plenaria del Consejo Universitario, el rector Enrique Graue Wiechers dijo que la Universidad Nacional ha redoblado esfuerzos en todos sus ámbitos para hacer frente con oportunidad a las circunstancias que impone la pandemia. Graue recordó que el pasado 23 de marzo se cumplió un año de que se suspendieron las actividades regulares presenciales en nuestra casa de estudios. Han sido 12 largos meses de intensa actividad en todas las funciones que dan sustento a esta institución y muestra de ello son las más de 15 mil actividades llevadas a cabo en este periodo, señaló. Hizo un recuento de las acciones efectuadas en docencia, investigación, extensión de la cultura, actividades deportivas, áreas administrativas y de servicios, y dijo que todos estos esfuerzos se han hecho y se seguirán haciendo por México. El rector de la Universidad Nacional manifestó también que el sector de educación superior debe acceder a la vacunación oportuna para poder regresar a las actividades presenciales con completa seguridad. En su intervención, Graue se comprometió a que los retrasos en el pago de salarios y los descuentos inadecuados a un grupo reducido del personal académico -profesores de asignatura y ayudantes de profesor- serán corregidos de acuerdo con la legislación y los convenios contractuales pactados. “Entiendo también la indignación que surgió en sectores de nuestra comunidad y comprendo la solidaridad con los docentes afectados. Son muestras de empatía y reconocimiento del alumnado hacia quienes les enseñan y velan por su desarrollo”, precisó. En estos meses, detalló, se ha laborado presencialmente con menos del 10 por ciento del personal administrativo, lo que ha provocado, entre otros efectos, retraso en trámites y entrega de títulos necesarios para que los egresados se incorporen al mercado laboral. Destacó que se realiza todo lo conducente para avanzar rápidamente y poder cumplir con esta obligación. Ante el pleno del máximo órgano de gobierno de la Universidad, el rector expuso que han surgido nuevas demandas o se han manifestado otras que no han sido satisfechas a plenitud, y aseveró que cuenta con la disposición de las direcciones y cuerpos colegiados de las distintas entidades académicas para resolver, en la medida de lo posible y dentro del marco de nuestra legislación, dichas inquietudes. “Porque todos queremos lo mismo: una Universidad justa, tolerante y unida en su diversidad para trabajar y progresar”, concluyó.