Tijuana, Baja California, octubre 18.- En el marco del mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, la comunicadora y activista, Claudia Urías compartió su testimonio de vida ante estudiantes de la Universidad las Californias Internacional (UDCI), en lo que respecta a su intensa lucha contra este mal que afecta a miles de mujeres en México. Durante su conferencia “El Reset de mi Vida”, recordó que luego de haber recibido la noticia sobre su enfermedad, aunque no de la manera más humana posible, continuó su deseo por vivir a pesar de la adversidad y los malos pronósticos dados a su salud, por lo que no dejó de investigar, aprender y consultar al respecto. Cada año, precisó, la incidencia de cáncer de mama aumenta en mujeres jóvenes de 23 a 25 años pero médicamente se desconoce la causa, por lo que recomendó la auto exploración. También existe la parte genética por lo que si hay un antecedente familiar de cáncer, las menores de cuarenta años deben revisarse con un especialista y si pasas de los cuarenta años es urgente practicarse una mamografía para detectarlo a tiempo. Claudia Urías refirió que por recomendaciones médicas y al no haber alternativas, pues se trataba de su vida, dijo que se procedió a la extirpación de su seno izquierdo, acompañado de intensas sesiones de quimioterapias y dosis antes impensables de medicamentos para recuperar la estabilidad de su cuerpo. Detalló que fue un proceso duro, complicado y agobiante el ver cómo su organismo se deterioraba, cual dura batalla interna proyectada hacia el exterior y que además la llevó a pensar estar en el último momento de su existencia, pero no fue así. La comunicadora destacó que la valentía, el amor y la ciencia fueron clave para mantenerse firme y optimista, aunque su físico llegó a no ser como el de antes dada la pérdida de su cabellera natural y una parte biológica de su ser, su espíritu fue fortalecido y engrandecido. Afirmó que la costumbre al tiempo fue parte paliativa de la transición, pero no algo devastador o con indicios de conformidad, dado que la oportunidad de un cambio con calidad se presentó en su vida, la posibilidad de la reconstrucción total de seno. Comentó que lo que parecía algo inalcanzable debido a los altos costos de todo tipo de intervención en el área de la cirugía plástica pudo verse como algo probable de lograrse a través de acciones altruistas y humanitarias. A partir de entonces su vida no solo fue reestructurada tal y como era antes del diagnóstico inicial, sino que renació Claudia Urías con optimismo, felicidad y un amor indudable a la vida, algo que manifiesta a diario con su testimonio a través de su fundación “para Jóvenes con Cáncer”. “Soy una luchadora, una guerrera que tras haber pasado por todo esto, fue como si hubiera dado un reset a mi vida, soy una persona nueva”, concluyó Claudia Urías.