París, Francia, octubre 17.- Surcar los aires en taxi parece que será una realidad en 2024. París se está preparando para los Juegos Olímpicos y ofrecerá este servicio para los clientes más exclusivos. La empresa alemana Volocopter ya lleva tiempo probando sus modelos eléctricos; sostenibles y que recuerdan más a un helicóptero que a un coche, aunque menos ruidosos y pesados. El Volocity, el modelo estrella de la compañía, es un biplaza que funciona con baterías eléctricas y opera con un sistema digital de control de vuelo que facilita la navegación. Ya se han invertido más de 600 millones de dólares desde su creación. Christian Bauer, director de ventas de Volocopter, asegura que se está muy cerca de la fase comercial: ya han recibido 300 pedidos de empresas privadas para operar conjuntamente sus taxis voladores. En el horizonte, gestionar viajes a través de una app con la que hacer reservas online, como en un taxi. Apenas un punto en el horizonte al principio, la nave eléctrica sorprendentemente silenciosa y parecida a un insecto sobrevuela París y sus atascos de tráfico, regalando a su pasajero, sin duda asombrado, vistas privilegiadas de la Torre Eiffel y la los techos de zinc gris característicos de la ciudad antes de aterrizarlo con un suave vuelo estacionario hacia abajo. Y así, si todo sale según lo planeado, podría escribirse una nueva página en la historia de la aviación. Después de años de conversaciones soñadoras y no siempre creíbles sobre cielos llenos de taxis eléctricos voladores que no contaminan, la industria de la aviación se está preparando para ofrecer un futuro que, según dice, está a la vuelta de la esquina. Aprovechando su momento en el centro de atención mundial, la región de París está planeando una pequeña flota de taxis voladores eléctricos para operar en múltiples rutas cuando sea sede de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024 el próximo verano. A menos que los reguladores de la aviación en China se adelanten a París dando luz verde a un taxi sin piloto para dos pasajeros que se está desarrollando allí, el posible operador de la capital francesa, Volocopter de Alemania, podría ser el primero en volar taxis comercialmente si los reguladores europeos dan su visto bueno.