El Centro de Estudios Económico de Baja California estableció que Baja California despidió 2024 con severos daños económicos, mismos que se reflejaron en el empleo formal, el avance de la pobreza salarial, cierre de empresas, salida de inversión extranjera, repunte de la inflación y el estancamiento del Producto Interno Bruto, elementos que ponen al estado “al borde de una recesión económica”. El CEEBC señaló que durante el 2024, por primera vez en 15 años, Baja California no generó empleos y cerró con una pérdida de 16 mil 490 puestos laborales formales. No solamente registró la peor cifra entre los estados de la frontera norte, sino que registró la segunda mayor pérdida de fuentes de trabajo a nivel nacional, especificó. Por otra parte, apuntó que en el 2024 Baja California registró el mayor cierre de empresas formales en 22 años, con 11 mil 349 establecimientos que suspendieron actividades, cifra que no se veía desde la recesión al inicio de este siglo y ni siquiera en la Gran Recesión del 2008-2009 ni durante la pandemia de COVID-19 y agregó que el mayor daño lo sufrieron las micro y pequeñas empresas que concentraron el 79% de los cierres. Respecto a las remuneraciones al trabajo, el CEEBC expuso que el sector formal sumó 2 años pagando en promedio menos de 2 Salarios Mínimos en Baja California, y resaltó que si se quiere crecer la economía debe haber una alza generalizada de salarios apoyada por un esquema de incentivos fiscales, pues las alzas aprobadas para este año han sido contraproducentes en la entidad, al tiempo que la igualdad salarial continúa siendo solo una promesa. El alza al Salario Mínimo continúa siendo insuficiente y aumentó el empobrecimiento salarial, pues con todo y su crecimiento muestra dos situaciones: aceleró el empobrecimiento salarial de los trabajadores que crecieron en el rango de hasta 2 Salarios Mínimos, mientras que los de más de 5 minisalarios se redujeron. Los primeros en máximo histórico y los segundos en su mínimo; por otra parte el minisalario continúa siendo insuficiente para comprar la canasta alimentaria, sin contar otros gastos como luz, renta, transporte, vestido, aseo personal, etcétera. En otro aspecto, el CEEBC señaló que la falta de infraestructura y servicios, entre otros la energía eléctrica y agua, acompañada de la ausencia de un plan de crecimiento y desarrollo, ha generado la mayor salida de inversión extranjera directa de la historia. Solamente entre el primero y tercer trimestre del 2024 se habían ido más de 402 millones de dólares, y en los últimos tres años se han ido casi 2 mil millones de dólares. Por último, el organismo recordó que la actividad económica de Baja California, medida a través del ITAEE (Indicador Trimestral de Actividad Económica del Estado) registró su menor crecimiento en cuatro años, afectado por la industria manufacturera. Los principales indicadores económicos de Baja California —advirtió—, están en línea, en sentido negativo, y lo más preocupante es que no se ve que los operadores económicos estén haciendo algo. Además, subrayó, el problema no viene de afuera, sino que se está generando desde adentro lo que es peor aún. Asimismo, refirió que “la inflación no se ha ido y Tijuana cerró el 2024 con la cifra más alta del país”. Imagen: Freepik.