El Banco de México bajó este jueves 18 de diciembre de 2025 un cuarto de punto la tasa de interés hasta el 7 por ciento, su decimosegundo recorte consecutivo, en un contexto de debilidad económica, inflación moderada y presiones comerciales. Esta es la cuarta rebaja de 25 puntos base en lo que va de año, después de cuatro recortes consecutivos de medio punto, lo que mantiene la desaceleración en el ritmo de recortes del precio del dinero, en línea con la expectativa del mercado. La decisión ocurre luego de que la semana pasada la Reserva Federal (Fed) de los Estados Unidos redujera, por tercera vez consecutiva, la tasas de interés en un cuarto de punto, situándola en el 3,6 %, su nivel más bajo casi tres años. En un comunicado detalló lo siguiente: Desde la pasada decisión de política monetaria, las tasas de interés de valores gubernamentales en México aumentaron en la mayoría de sus plazos. El peso mexicano se apreció. Se anticipa que en el cuarto trimestre de 2025 la actividad económica se haya mantenido débil. El entorno de incertidumbre y de tensiones comerciales continúa implicando importantes riesgos a la baja. Entre la primera quincena de octubre y el mes de noviembre, la inflación general aumentó de 3.63 a 3.80%, y la subyacente, de 4.24 a 4.43%, principalmente por un aumento en la inflación de las mercancías no alimenticias. Las expectativas de inflación general para el cierre de 2025 disminuyeron ligeramente. Las de mayor plazo permanecieron relativamente estables en niveles por arriba de la meta. Los pronósticos de las inflaciones general y subyacente se ajustaron al alza para el cuarto trimestre de 2025 y los siguientes dos. Dicho ajuste es resultado principalmente de una reducción más gradual de lo previsto en la inflación de servicios, mientras que el aumento registrado en la inflación de las mercancías tiene un impacto menor sobre la revisión de dichos pronósticos. Se continúa esperando que la inflación general converja a la meta en el tercer trimestre de 2026. Los pronósticos están sujetos a los siguientes riesgos. Al alza: i) depreciación del peso mexicano; ii) persistencia de la inflación subyacente; iii) presiones de costos; iv) disrupciones por conflictos geopolíticos o políticas comerciales; y v) afectaciones climáticas. A la baja: i) una actividad económica menor a la anticipada; ii) un menor traspaso de aumentos en los costos; y iii) menores presiones por la apreciación de la moneda nacional. Se anticipa que los ajustes fiscales tengan un efecto transitorio y no necesariamente proporcional en los precios. No obstante, la evaluación integral de su impacto requerirá incorporar información adicional conforme esta se encuentre disponible. En este sentido, la Junta de Gobierno valorará actualizar el pronóstico de inflación para reflejar de manera más precisa los efectos asociados a dichas medidas. Se considera que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico mantiene un sesgo al alza, si bien este es menos pronunciado que el enfrentado entre 2021 y 2024. Los cambios de política económica por parte de la administración estadounidense siguen añadiendo incertidumbre a las previsiones. Sus efectos podrían implicar presiones sobre la inflación en ambos lados del balance. La Junta de Gobierno juzgó apropiado continuar con el ciclo de disminuciones de la tasa de referencia. Ello en congruencia con la valoración del actual panorama inflacionario. En particular, consideró el comportamiento del tipo de cambio, la debilidad que ha mostrado la actividad económica y los posibles impactos ante cambios en políticas comerciales a nivel global. Tomó en cuenta el grado de restricción monetaria que se ha implementado. Así, la Junta de Gobierno, con la presencia de todos sus miembros, decidió por mayoría reducir en 25 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 7.00%.