Bonilla instruye al Issstecali para condonar deuda de Tecate y Ensenada

foto-resumen

Por Julieta Aragón Tijuana, Baja California, octubre 9.- El gobernador Jaime Bonilla Valdez emitió un decreto en el que instruye al director del Issstecali, Odylar Moreno, para convocar a su Junta Directiva para que “de manera inmediata” celebren una sesión extraordinaria en donde se proponga la condonación del 99.9% de los recargos, aportaciones y adeudos no cubiertos por los Ayuntamientos de Tecate y Ensenada. En el artículo segundo del decreto publicado en un número especial en el Periódico Oficial del Estado, el 7 de octubre de 2021, Bonilla instruye a los titulares de las dependencias del Poder Ejecutivo Estatal que formen parte de la Junta Directiva del Issstecali a que “avalen y aprueben” la condonación de la deuda histórica y actual, de los municipios gobernador Darío Benítez y Armando Ayala, respectivamente. Quienes son cercanos al mandatario estatal. Sin precisar a cuánto asciende la deuda de ambos municipios con el Issstecali, la administración bonillista justificó que la condonación se debe a que la situación financiera de Tecate y Ensenada es “crítica, en razón de la insolvencia económica que les impide cumplir las obligaciones encomendadas de manera óptima”. El 15 de marzo de 2021, la entonces presidente municipal de Tecate, Zulema Adams dijo a ZETA que el Ayuntamiento debía mil 100 millones al Issstecali. Deuda que utilizó el gobierno estatal para denunciar a la alcaldesa ante autoridades judiciales. Se sabe que al cierre de 2020, la deuda de Ensenada rondaba los mil 800 millones de pesos. Además, se arguye que la deuda histórica de ambos municipios “es tan alta que desde un punto de vista financiero sería inútil mantener dicho adeudo histórico pues el mismo es materialmente impagable”. En el documento no se indica si el gobierno estatal cuenta con solvencia económica para cubrir el boquete que dejará la condonación al Issstecali, pero Bonilla Valdez acusa que el endeudamiento elevado de los municipios “es resultado del deplorable manejo de las finanzas públicas de las administraciones pasadas, insolvencia que se agravó en razón a la mala administración, el derroche de los pocos recursos económicos provenientes de las participaciones federales y estatales”.