Con la segunda inflación más alta en 26 años y 7 récords de calor, la luz destruye el bolsillo de los mexicalenses

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Los hogares de Mexicali no solamente han tenido que enfrentar un verano más cálido este año, sino además el costo por el consumo de energía eléctrica que en agosto alcanzó la segunda mayor inflación mensual para un mismo mes desde 1996, es decir, 26 años, con el 1.96 por ciento, mientras la inflación general se movió apenas 0.12 por ciento. Lo anterior fue dado a conocer por el Centro de Estudios Económicos de Baja California en su reporte semanal, en el que agrega que el impacto no solamente fue mensual, ya que en el registro anualizado también se disparó para colocarse en 4.33 por ciento, la cifra más alta desde mayo del 2019. La inflación anualizada de agosto se ubicó en 5.93 por ciento, cifra muy por encima de la del mismo mes del 2020 cuando creció 3.59 por ciento. El CEEBC destacó que estos datos son preocupantes, ya que si el precio de la electricidad aumenta, los consumidores pierden poder adquisitivo. Asimismo, su ingreso disponible real se reduce vía el aumento del nivel de precios y la posible baja en la actividad económica, especialmente en un periodo tan crítico como es el verano en la capital del Estado. Finaliza recordando que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingreso Gasto del INEGI los hogares destinan el 7 por ciento de su gasto al pago de energía eléctrica en Baja California; sin embargo, para la capital del Estado se estima que en el verano llega a ser entre el 20 y hasta el 40 por ciento en los hogares más pobres, esto a pesar del subsidio y recordó que además, los hogares con acceso a las famosas tarjetas subsidio para la luz representan apenas el 4.2 por ciento de los hogares en Baja California, donde además, casi 816 mil se encuentran en condición de pobreza, de acuerdo con cifras del Coneval.

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La inflación anualizada de agosto se ubicó en 5.93 por ciento, cifra muy por encima de la del mismo mes del 2020 cuando creció 3.59 por ciento. El CEEBC destacó que estos datos son preocupantes, ya que si el precio de la electricidad aumenta, los consumidores pierden poder adquisitivo. Asimismo, su ingreso disponible real se reduce vía el aumento del nivel de precios y la posible baja en la actividad económica, especialmente en un periodo tan crítico como es el verano en la capital del Estado. Finaliza recordando que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingreso Gasto del INEGI los hogares destinan el 7 por ciento de su gasto al pago de energía eléctrica en Baja California; sin embargo, para la capital del Estado se estima que en el verano llega a ser entre el 20 y hasta el 40 por ciento en los hogares más pobres, esto a pesar del subsidio y recordó que además, los hogares con acceso a las famosas tarjetas subsidio para la luz representan apenas el 4.2 por ciento de los hogares en Baja California, donde casi 816 mil se encuentran en condición de pobreza, de acuerdo con cifras del Coneval.