Nueva York, julio 7.- El mundo está inmerso en una triple crisis planetaria de cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación y residuos. La economía global consume cada vez más recursos naturales, mientras que el mundo no va por buen camino para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible, difundió la ONU Programa para el Medio Ambiente. La comunidad científica nunca antes había coincidido tanto ni se había mostrado tan decidida sobre la necesidad de una transformación mundial urgente hacia el uso sostenible de los recursos, señala en un comunicado y agrega que: En la edición 2024 de Panorama de los Recursos Globales arroja luz sobre cómo los recursos son esenciales para la aplicación eficaz de la Agenda 2030 y de los acuerdos multilaterales sobre medio ambiente (AMUMA) para hacer frente a la triple crisis planetaria. El informe reúne los mejores datos, modelos y evaluaciones disponibles para analizar las tendencias, las repercusiones y los efectos distributivos del uso de los recursos. Se basa en más de 15 años de trabajo del Panel Internacional de Recursos, incluidas las evaluaciones científicas y las aportaciones de los países, una amplia red de partes interesadas sobre el terreno y expertos regionales. El informe ilustra cómo, desde su edición de 2019, se han mantenido o acelerado las tendencias al alza en el uso mundial de los recursos. El informe también muestra cómo se espera que la demanda de recursos siga aumentando en las próximas décadas. Esto significa que, sin una acción urgente y concertada, para 2060 la extracción de recursos podría aumentar en un 60% con respecto a los niveles de 2020, lo que provocaría daños y riesgos cada vez mayores. Sin embargo, este destino no está sellado. El informe también describe el potencial para invertir las tendencias negativas y situar a la humanidad en una trayectoria hacia la sostenibilidad. Para ello, es fundamental una actuación política audaz que elimine gradualmente las actividades insostenibles, acelere formas responsables e innovadoras de satisfacer las necesidades humanas y cree condiciones propicias para la aceptación social y la equidad en las transiciones necesarias. Esto incluye medidas urgentes para tener en cuenta el uso de los recursos en el cumplimiento de los acuerdos multilaterales sobre medio ambiente, definir soluciones alternativas para el uso sostenible de los recursos y poner en marcha incentivos financieros, comerciales y económicos adecuados. El camino hacia la sostenibilidad es cada vez más empinado y estrecho, y la ventana de oportunidad se está cerrando. La ciencia es clara: la cuestión clave ya no es si es necesaria una transformación hacia el consumo y la producción sostenibles de recursos a escala mundial, sino cómo hacerla realidad ahora. Abordar esta realidad, basándose en conceptos evolutivos de una transición justa, es una parte esencial de cualquier camino creíble y justificable hacia el futuro. Nuestras economías se han basado durante demasiado tiempo en la extracción, el uso y el vertido incesantes e insensatos de recursos. El uso de materiales y recursos se ha triplicado en los últimos 50 años y sigue creciendo a un ritmo medio del 2,3% anual. Nuestro uso derrochador de estos materiales destruye la naturaleza, calienta el clima, contamina los ecosistemas, alimenta las desigualdades y, francamente, tira el dinero directamente por el retrete. Si el mundo sigue las políticas y los cambios que se describen en este informe, obtendremos importantes beneficios, y no sólo para el medio ambiente. El crecimiento del uso de materiales podría caer un 30%. Podríamos reducir la demanda de energía y materiales, lo que ayudaría a garantizar suficientes minerales y metales para la transición energética sin devastar la Tierra, un objetivo que es el tema de una resolución en esta Asamblea. Las emisiones de gases de efecto invernadero podrían reducirse en más del 80%. Podríamos tener un PIB mundial un 3% mayor que el previsto. Podríamos tener un mundo más justo con una distribución más equitativa de esta riqueza. En definitiva, la triple crisis planetaria está impulsada por un consumo y una producción insostenibles. Debemos trabajar con la naturaleza, en lugar de limitarnos a explotarla. Reducir la intensidad del uso de recursos en los sistemas de movilidad, vivienda, alimentación y energía es esencial para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible y, en última instancia, un planeta justo y habitable para todos. La Perspectiva de los Recursos Mundiales nos indica cuáles son las medidas que debemos adoptar para alcanzar este objetivo. Deberíamos seguirlas, empezando por aprobar resoluciones firmes en esta Asamblea en torno a la circularidad y la extracción y el uso responsables de metales y minerales.