Al calificar de “combinación perversa” a la combinación de inflación y precariedad salarial que vive Baja California, el Centro de Estudios Económicos de Baja California alertó que con esta situación no es posible que el Estado sea competitivo y mucho menos que dé calidad de vida a sus habitantes. “No se trata solamente de generar empleos, sino de la calidad de los mismos”, subrayó, al tiempo que alertó por la creciente pobreza salarial que enfrentan los trabajadores bajacalifornianos. El CEEBC informó que si bien en el lapso enero-septiembre se agregaron al sector formal 17 mil 105 nuevos puestos de trabajo formales, el problema es que en ese periodo se crearon 92 mil 534 del nivel de hasta 2 Salarios Mínimos (SM) llevando esta cifra de trabajadores a un nuevo máximo histórico con 543 mil 445, lo que representa el 52.2 por ciento del total de los ocupados registrados en el IMSS. En el resto de los grupos salariales se registraron cifras para ese periodo realmente escalofriantes: Los de 3 SM se redujeron en 30 mil 845; los de 4 SM bajaron en 16 mil 845; los de 5 SM disminuyeron en 8 mil 356 y los ocupados con sueldos de más de 5 SM se redujeron 19 mil 245 plazas. “Mientras los ocupados formales que ganan más de 5 SM continúan tocando mínimos históricos, los de hasta 2 SM se mueve a la inversa, lo que genera una perversa desigualdad social, una sociedad que se empobrece y frena el desarrollo social. Los ocupados con hasta 2 Salarios Mínimos tocaron el mayor nivel desde que el IMSS lleva registros en la entidad, algo que en Baja California se antojaba imposible hace apenas diez años”, concluye el reporte. Cabe recordar que en septiembre se agregaron 6 mil 389 empleos formales y de ellos 8 mil 199 fueron de hasta 2 SM. Los de 3 crecieron 2 mil 841, mientras que el resto de los niveles salariales se redujo en 4 mil 651 de acuerdo con el IMSS. Puro empleo basura.