La recuperación sigue siendo frágil, incompleta y heterogénea: Banxico

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Ciudad de México, enero 6.- Luego de que en 2020 el Producto Interno Bruto (PIB) de México sufrió su peor caída desde los años treinta al desplomarse en 8.2 por ciento, mientras que para 2021 se prevé un alza de alrededor del 6 por ciento, la recuperación continúa siendo frágil, incompleta y heterogénea entre sectores”, refiere la Minuta de la más reciente reunión de la Junta de Gobierno del Banco de México. Asimismo, confirmó que las expectativas de inflación para 2022 se encuentran por encima de la meta del 3 por ciento y que el alza de precios ya no parece un fenómeno transitorio. Todos (los integrantes del Banxico) señalaron que los pronósticos de las inflaciones general y subyacente se revisaron nuevamente al alza, especialmente los de 2022”, según reveló este jueves la minuta del banco central sobre su última reunión de 2021. Por lo que algunos miembros de la junta comentaron que “el fenómeno de reajuste en precios relativos y los argumentos sobre la transitoriedad de las presiones inflacionarias ya no parecen apropiados para explicar la situación actual”, indicó el documento. La minuta corresponde a la reunión del pasado 16 de diciembre, cuando el banco central elevó la tasa de interés al 5.5 por ciento, un aumento de 50 puntos base y el quinto incremento consecutivo del objetivo. En noviembre, México registró su dato de inflación más alto en los últimos 20 años al llegar al 7.37 por ciento interanual, mientras que la subyacente creció un 5.67 por ciento. La mayoría indicó que el balance de riesgos con respecto a la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se ha vuelto a deteriorar y se mantiene al alza”, según se destaca en la minuta. Sin embargo, los integrantes del Banxico coincidieron en que las presiones en el alza de precios siguen siendo principalmente externas debido a “los cuellos de botella en la producción, por la recomposición del gasto hacia mercancías, por los elevados precios de alimentos y energéticos, y por la recuperación de algunos servicios”. Como ya sucedió en las decisiones pasadas, el subgobernador Gerardo Esquivel fue el único que no votó a favor del alza en las tasas. “Debe evitarse una visión cortoplacista que reaccione mecánicamente con incrementos de tasas ante cualquier choque”, criticó Esquivel, según se recoge en el documento.