Ensenada, Baja California, noviembre 2.- En reunión con el presidente municipal el Consejo de Desarrollo Económico de Ensenada, indicó Marcó Estudillo Bernal, presidente del organismo dijo que: “estamos listos para potencializar las vocaciones productivas del municipio y para impulsar una reactivación económica”. En su mensaje, quedó muy clara cuál es la situación de Ensenada, el municipio más abandonado del Estado tanto por Kiko Vega como por Jaime Bonilla “Externamos nuestro interés en aportar lo necesario para que, a la brevedad, el Programa de Desarrollo Urbano del Centro de Población de Ensenada permita formalizar jurídicamente los usos, destinos y reservas del suelo para darle certidumbre a toda la actividad productiva en el municipio”, dijo. Agregó que “la competitividad municipal y estatal, necesitan que las condiciones en términos de regulaciones sean a la altura del tiempo en que vivimos, por lo que seguiremos trabajando para lograr una mejora regulatoria que favorezca el crecimiento y desarrollo económico y social del municipio”. EMPLEOS El discurso de Estudillo se debe entender en el contexto de una Ensenada que ha sido golpeada como nunca entre la pandemia y malas decisiones de gobierno. En septiembre su empleo formal tuvo un recorte de 2,750 empleos con lo que se mantuvo la inestabilidad en el ámbito laboral, pues comparado el número total de ocupados formales de septiembre (115,672) con los de abril del 2020 (113,633) cuando les estalló la pandemia muestran un avance de apenas 2 mil 39 empleos en el lapso de un año y seis meses. Además, de acuerdo con Banco de México el PIB ensenadense tuvo una caída récord del 15.2 por ciento en el periodo más severo de la pandemia, donde se incluyen pérdidas millonarias en el turismo, especialmente por la suspensión de cruceros durante más de un año. Veremos si el alcalde Armando Ayala aprendió algo en sus tres primeros años de gobierno, aunque por ahora su manejo de las finanzas públicas ha sido espantoso.