Las remesas familiares hacia Tecate superaron el total de nueva inversión extranjera directa de todo el Estado de Baja California en el primer trimestre de 2021, de acuerdo con cifras del Banco de México (documenta remesas) y la Secretaría de Economía federal (documenta inversión). Cabe mencionar que Tecate es el municipio que menos ingresos por remesas registró en el Estado al primer trimestre con 9.8 millones de dólares, mientras que las nuevas inversiones en toda la entidad apenas llegaron a los 6.9 millones de dólares en el mismo lapso, para reportar el más bajo nivel en 6 años. Con los datos mostrados se evidencia nuevamente el estancamiento económico estatal y su dependencia de los recursos procedentes de Estados Unidos que se han acentuado a niveles preocupantes, sobre todo cuando se trata de dinero que apoya a los hogares ante la ineficiencia de los programas del gobierno, fortaleciendo la economía parasitaria de Baja California, advierte el Centro de Estudios Económicos de Baja California (CEEBC). El CEEBC recuerda que “el término economía parasitaria se refiere a la distorsión económica que resulta de la dependencia de otra economía para satisfacer las demandas internas, de allí parte la analogía con los parásitos, organismos que viven a costa de otros para sobrevivir”. “En el caso de Baja California este adjetivo de economía parasitaria deriva de dos situaciones: la ausencia de una estrategia de desarrollo económico, con lo que se tiende una cortina de humo que por otra parte, esconde la carencia de acciones para impulsar el desarrollo o para ser más precisos hay un divorcio entre crecimiento y desarrollo”, aseveró en un reporte el CEEBC. De tal manera, la comparación entre las remesas de Tecate y las nuevas inversiones en Baja California, encienden los focos rojos de un Estado que, de continuar sin rumbo, su mayor dependencia de Estados Unidos será síntoma de una entidad que fue olvidada por las autoridades y condenada al empobrecimiento.