Los fondos de estabilización son mecanismos que ayudan a los países a enfrentar los problemas que surgen cuando sus ingresos públicos tienen caídas repentinas (como por ejemplo ante una caída en el precio del petróleo o de otras materias primas, o bien, menores ingresos tributarios a los esperados). Estos mecanismos funcionan como un fondo de ahorro que puede usarse para mitigar las vulnerabilidades provocadas por la fluctuación de los mercados y de los precios, así como para evitar un alza repentina de los impuestos o una contracción del gasto (Moreno 2004). El Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios (FEIP) El propósito del FEIP es reducir los efectos sobre las finanzas públicas y la economía cuando se presenten disminuciones de los ingresos estimados en la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) que impidan cubrir el gasto público. En CIEP identificamos que, durante la pandemia por COVID-19, los fondos de estabilización fueron utilizados por la desaceleración de la economía mexicana. Al cierre de 2022, pese a que el fondo obtuvo ingresos mayores a sus gastos, no se han recuperado los montos previos a la contingencia sanitaria, por lo que el país no cuenta con los recursos suficientes para enfrentar a una nueva crisis económica de la misma magnitud.