Con datos ajustados por estacionalidad, en enero de 2025, la inflación anual de Estados Unidos se situó en 3.0%, dato inferior al registrado en el mismo mes del año previo (3.1%) pero superior al reportado en diciembre de 2024 (2.9%); por lo que, acumula 47 meses continuos por arriba del objetivo de inflación promedio de largo plazo (2.0%), establecido por la Reserva Federal (FED). Con cifras desestacionalizadas, el Índice de Precios al Consumidor de Estados Unidos aumentó 0.5% en enero respecto al mes previo. A su interior, el índice de energía creció 1.1%, como resultado de un incremento de 1.8% en los precios de las gasolinas; en tanto que, los servicios energéticos, tuvieron un ascenso de 0.3 por ciento. Por su parte, los índices de autos y camiones usados, servicios de transporte y vivienda registraron subidas de 2.2, 1.8 y 0.4%, cada uno; mientras que, el de alimentos se elevó 0.4%. Eliminando los efectos de los precios de alimentos y energía, la inflación fue de 0.4% en el periodo de análisis.