Bruselas, Bélgica, febrero 14.- La actividad económica de la eurozona se expandió 0,1% en el cuarto trimestre de 2022, mientras que el PIB del conjunto de la Unión Europea se mantuvo estable en el mismo periodo, de acuerdo con los datos difundidos este martes por la oficina comunitaria de estadística Eurostat. El organismo mantiene así sus estimaciones preliminares, que confirman la ralentización económica pero descartan por ahora la contracción entre octubre y diciembre del año pasado que muchas instituciones preveían, en línea con las previsiones publicadas ayer por la Comisión Europea. Bruselas concluyó este lunes que el bloque ha evitado "por poco" la recesión técnica gracias a un comportamiento de la economía mejor de lo esperado en el tramo final de 2022 que derivó de la disminución de los precios energéticos y de un mayor dinamismo en la creación de empleo, lo que le llevó a mejorar sus proyecciones para este año. Aun así, el incremento del 0,1 % en la zona euro y el estancamiento en el bloque (0 %) en los últimos tres meses de 2022 contrastan con el crecimiento económico del 0,3 % observado en ambas zonas en el trimestre anterior y suponen un aumento del 1,9 % y del 1,8 %, respectivamente, en tasa interanual. Esto deriva, según los primeros cálculos de Eurostat, en un crecimiento anual desestacionalizado del 3,5 % en los países de la moneda común y de un 3,6 % en los Veintisiete. Entre los países con datos disponibles, Irlanda lideró el crecimiento económico de la UE en el cuarto trimestre de 2022 con una expansión del 3,5 %, seguido de lejos por Dinamarca, Chipre y Rumanía (1,1 %), Eslovenia (0,8 %), Países Bajos (0,6 %), Bulgaria (0,5 %), Letonia y Eslovaquia (0,3 %), España y Portugal (0,2 %) y Bélgica y Francia (0,1 %). Por contra, se observaron caídas de la actividad en Polonia (-2,4 %), Lituania (-1,7 %), Austria (-0,7 %), Suecia (-0,6 %), Hungría (-0,4 %), República Checa (-0,3 %), Alemania y Finlandia (-0,2 %) e Italia (-0,1 %).