Bruselas, Bélgica, marzo 2.- La inflación en la eurozona rompió un récord por cuarto mes consecutivo y planteó dudas sobre cuándo debería intervenir el banco central para aliviar la presión sobre los consumidores, mientras la invasión rusa en Ucrania remecía la economía global. Los precios del consumo en los 19 países que utilizan el euro aumentaron a un 5.8% interanual en febrero, según reportó el miércoles la agencia estadística de la Unión Europea, Eurostat. Las últimas cifras reflejaban las dificultades de los consumidores del continente y aumentaban la presión sobre el Banco Central Europeo, que trataba de determinar cuándo y cómo subir las tasas de interés para aliviar la inflación. La cifra de inflación dejó atrás el récord de 5.1% del mes pasado y alcanzó su nivel más alto desde que comenzaron los registros del euro en 1997. La inflación en Europa, como en otras grandes economías, se ha visto impulsada por la subida de los precios de la energía, un problema que se verá agravado por la invasión rusa en Ucrania. Rusia, una importante productora de gas y petróleo, se ha visto sujeta a sanciones y restricciones de exportaciones que han provocado el temor a una interrupción de sus entregas, aunque eso no ha ocurrido por el momento.