Bruselas, Bélgica, diciembre 29 (EuroNews).- Ómicron sigue batiendo récords en Europa. Lo hace en países como Francia, donde el último dato habla de 179.807 casos en 24 horas, la cifra más alta desde el inicio de la pandemia. El Elíseo anunciaba el lunes nuevas medidas para hacer frente a la propagación, aunque sin imponer restricciones drásticas de cara a la Nochevieja, sino para después. El Gobierno pretende además acelerar la campaña de refuerzo reduciendo el plazo entre dosis y dosis de cuatro a tres meses. "Ninguna medida aislada resolverá esta cuestión", dice Jean-Yves, ciudadano de Mougins de visita en París. "Nos enfrentamos a lo desconocido con estas variantes y creo que el Gobierno trata de hacer lo mejor posible, al tiempo que intenta preservar las libertades individuales". Números récord también en Grecia, 21.657 en las últimas 24 horas, la primera vez que este país alcanza los cinco dígitos en sus cifras de nuevos contagios. De los nuevos contagios, 9.882 se registraron en Ática y 2.665 en Salónica. La Organización Nacional de Salud Pública informó también de 60 fallecidos. Más vacunación, menos ingresos Portugal también presenta más nuevos casos que nunca, 17.172, aunque las hospitalizaciones siguen siendo bajas, con 936 ingresados con COVID-19, muy lejos de los 6.869 del pasado 1 de febrero. Con cerca del 87 por ciento de sus 10 millones de habitantes vacunados y casi 2,4 millones de personas con la tercera dosis de refuerzo, Portugal tiene una de las tasas de vacunación contra el virus más altas del mundo. En Polonia sin embargo el número de casos disminuye, hasta el punto que el Gobierno se muestra favorable a relajar las restricciones o, al menos, a no imponer nuevas, como confirmaba desde el ministerio de Sanidad su portavoz, Wojciecz Andrusiewicz: "Hoy podemos ver que, a pesar del creciente riesgo de infección con la variante ómicron, el número de nuevos casos en Polonia no empezó a subir después de Navidad", explicaba Andrusiewicz. "Así que por ahora, recalco, por ahora, no tenemos previsto introducir nuevas restricciones". En Bélgica también se levantan, por ley, algunas restricciones. La Justicia suspendía el martes la orden de cerrar cines, teatros y salas de conciertosanunciada la semana pasada por el primer ministro Alexander De Croo. Según el Consejo de Estado, las autoridades no han demostrado "de qué manera estos lugares son especialmente peligrosos por facilitar la propagación del virus, hasta el punto de ordenar su cierre".