Varsovia, Polonia, noviembre 7 (EuroNws).- Intento masivo de entrar a Polonia desde Bielorrusia. Miles de migrantes, principalmente originarios de Oriente Medio, han llegado este lunes hasta la frontera entre ambos países. Algunos se han valido de palas , trozos de madera o alicates para intentar cortar la alambrada. Hasta cuatro mil personas Las autoridades polacas aseguran haber detenido la primera oleada. En algunos casos, lanzando gases lacrimógenos. Han sido entre 3 000 y 4 000 personas, según el portavoz del Gobierno polaco, que denuncia provocaciones físicas y psicológicas. "También nos enfrentamos a provocaciones por parte de los soldados bielorrusos y de la gente relacionada con ellos. Por ejemplo, apuntando con sus armas a nuestras tropas, disparando balas de fogueo . Por supuesto, nuestros militares no pueden saber si se trata de una bala de fogueo o es munición real. También disparan al aire balas reales. Esperamos que estos incidentes armados en la frontera polaca puedan pasar en un futuro cercano, lo tememos e informamos sobre ello". Célula de crisis Los migrantes rechazados se han instalado en un campamento improvisado y son vigilados por fuerzas bielorrusas, señalan fuentes polacas. Mientras, en Varsovia, una célula de crisis del Gobierno asegura estar preparándose para diferentes escenarios. La OTAN ha calificado de inaceptable lo que considera una táctica de guerra híbrida. La Unión Europea ha vuelto a acusar al presidente Alexandr Lukashenko de organizar caravanas como esta en represalia por sus sanciones contra Minsk. Después de que la Unión Europea impusiera sanciones a Minsk, el pasado mes de junio, por graves violaciones de los derechos humanos, surgió una nueva crisis humanitaria, en las fronteras de Bielorrusia con la Unión Europea. Los líderes europeos acusan a la Administración que lidera el presidente bielorruso Aleksander Lukashenko, de tomar represalias, empujando a miles de inmigrantes hacia los países vecinos de Europa del Este; naciones que, en respuesta a su actitud, han 'sellado' sus fronteras. Un tira y afloja político que ha convertido las fronteras orientales de la Unión Europea en una trampa, a veces mortal, para miles de solicitantes de asilo. La corresponsal internacional de Euronews, Valérie Gauriat, viajó a Polonia para ser testigo de su situación y contemplar la consternación de la población local polaca. En su relato, los migrantes cuentan a la periodista que, muchos de ellos, fueron detenidos durante una semana, entre las fronteras de Polonia y Bielorrusia sin comida, sin agua… Su situación es crítica y los activistas polacos que les ayudan están convencidos de que varios han muerto y de algunos otros, están a punto de morir.