No cabe duda que es contrastante la realidad de Baja California con el discurso de Marina del Pilar, quien el día de la celebración de la Independencia ensalzó a las familias, los niños y las mujeres, mientras las cifras de incidencia delictiva en el Estado presentan los indicadores delictivos que les afectan en los niveles más altos en casi una década. Así, el Secretariado de Seguridad Pública de la Secretaría de Gobernación reportó que en el lapso enero-julio un total de mil 139 delitos de abuso sexual, lo cual representó un aumento del 15.9 por ciento a tasa anual, pero no para, ya que se trata de la mayor cifra desde el año 2015, es decir, en nueve años. Asimismo, a su interior la violación simple presentó un aumento del 8.1 por ciento, lo cual es muy cuestionable cuando tenemos a una entidad donde la mayoría de los líderes políticos son mujeres, comenzando por la gobernadora.