“Es un agravio a toda la sociedad, es un agravio a México”, manifestaron jueces y magistrados federales con sede en Mexicali, en rechazo a la reforma al Poder Judicial de la Federación propuesta por Andrés Manuel López Obrador. Aseguraron en rueda de prensa que se pone en riesgo y vulnera los derechos humanos de la población, ya que es en el PJF donde se llevan a cabo los amparos que solicita la población cuando la autoridad les niega un servicio o un derecho fundamental. Estuvieron presentes, jueza Laura Isabel Guerrero Vara, titular del Juzgado Segundo de Distrito en el estado de Baja California; jueza María Del Socorro López Villarreal, titular del Juzgado Tercero de Distrito en el estado de Baja California, jueza Martha Alicia Alanís Sánchez, titular del Juzgado Sexto de Distrito en el estado de Baja California; juez Óscar Molina Zavala, titular del Centro de Justicia Penal Federal en el estado de Baja California; magistrado Alejandro Gracia Gómez, integrante del Sexto Tribunal Colegiado del Decimoquinto Circuito en el estado de Baja California, todos ellos con residencia en Mexicali. Los trabajadores del Poder Judicial de la Federación lamentaron que legisladores del partido en el Poder aseguren que la reforma será una realidad “como lo manda el jefe” (presidente) ya que esto rompe con la división de poderes. Señalaron que el Poder Judicial de la Federación es el “poder incómodo” que no se doblega a los pies del ejecutivo “y no lo pensamos hacer”, aseguraron. En cuanto a los privilegios que se dice que ostentan, los jueces y magistrados señalaron que el sueldo de un juez es similar al de otros profesionistas, como podría ser un jefe de un departamento en una maquiladora, o un contador o representante legal de una empresa privada. Así mismo, señalaron que el trabajo que realizan es arduo los siete días de la semana, por lo que no hay “sabadazos” en el PJF, sobre todo en materia penal se trabajan los 365 días del año y se resuelve conforme a los términos legales, así sea que estos caduquen en viernes, sábado, domingo o el día que corresponda, y la hora que corresponda, no como señaló el presidente de México recientemente en su mañanera. Concluyeron que más que estar preocupados por sus cargos, por su carrera que sería truncada, si la reforma se aprueba para elegir a jueces, magistrados y ministros con el voto popular, les angustia que el país quede en manos de una sola persona y se convierta en una dictadura.