Gracias a que “Baja California mantiene un sostenido control en el panorama epidemiológico, así como en las hospitalizaciones”, según el encargado de salud, J. Adrián Medina Amarillas, en el Estado las muertes por COVID crecieron 31.4 por ciento en el primer cuatrimestre del año que está por terminar. Datos de la Secretaría de Salud federal indican que mientras en el cuarto cuatrimestre del año pasado, cuando se registró la temporada más fría del año, murieron 51 bajacalifornianos, en el primero del 2023 la cifra se elevó a 67, recordándonos que la pandemia no se ha ido y que contrario a lo que difunde Medina no ha existido en ningún momento un control del COVID-19 mediante el establecimiento de medidas preventivas entre la población y que la "mejoría" está solamente en los fumados boletines que emite Medina. La cifra total de muertos hasta ahora es de 12 mil 524, aunque tomando en cuenta el subregistro, la cifra rebasa los 15 de acuerdo con el Registro Nacional de Población.