Beijing, China, octubre 21.- China ha anunciado oficialmente que suspende importaciones de soja estadounidense, marcando la primera interrupción total de compras desde la década de 1990. Esta decisión es un hito en la prolongada guerra comercial entre las dos economías más grandes del mundo. En 2024, Estados Unidos exportó a China más de 12 mil millones de dólares en soja, representando alrededor del 20 % del total de importaciones de soja de China. Los expertos advierten que esta suspensión provocará una redistribución de los flujos de suministro y un aumento en los precios mundiales de la soja, al mismo tiempo que refuerza la estrategia económica y el posicionamiento geopolítico de China. Razones por las que China suspende importaciones de soja estadounidense 1. Tensiones comerciales crecientes La principal razón por la que China suspende importaciones de soja estadounidense son las crecientes tensiones comerciales con Estados Unidos. Los aranceles, las restricciones a la exportación y la presión política han llevado a Pekín a buscar proveedores alternativos. En 2024, las exportaciones estadounidenses representaban el 20 % de todas las importaciones de soja de China, generando 12–13 mil millones de dólares para los agricultores estadounidenses. 2. Diversificación estratégica de suministros Para compensar la suspensión, China ha aumentado significativamente las compras de soja de otros países: Brasil — aumento del 35 %, aproximadamente 10 millones de toneladas Argentina — aumento del 22 %, aproximadamente 5 millones de toneladas Esta estrategia permite a China mantener la estabilidad del mercado interno y garantizar el suministro de soja. 3. Seguridad alimentaria y autonomía económica La interrupción de importaciones de soja estadounidense forma parte de una estrategia más amplia de China para diversificar sus fuentes de materias primas y fortalecer la seguridad alimentaria. Reducir la dependencia de EE. UU. permite a China consolidar su influencia en el mercado agrícola global. Impacto económico de la suspensión En Estados Unidos: La pérdida de su mayor comprador, por un valor superior a 12 mil millones de dólares anuales, genera presión significativa sobre los agricultores y el sector agrícola en general. En China: La demanda de soja se mantiene estable, con más de 100 millones de toneladas anuales. Gracias a la compra de soja en Sudamérica, China compensa la ausencia de importaciones estadounidenses y mantiene la estabilidad interna del mercado. En el mercado mundial: Se prevé un incremento de los precios globales de soja del 8–12 % en 2025. El costo del aceite de soja y la harina para piensos podría subir entre 5–10 %, afectando la cadena de producción de alimentos y piensos a nivel global. Además, la suspensión de importaciones de soja estadounidense por parte de China altera las rutas comerciales: Brasil y Argentina incrementan sus exportaciones, redirigiendo flujos logísticos y elevando los precios internacionales. (Con datos de China Global).