El desabasto de medicamentos en México tuvo como causas la ineficacia en gestión, planificación y compra de insumos por parte del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, asegura un artículo publicado en la revista científica The Lancet. El texto expone que, mientras se sigue culpando a las empresas farmacéuticas de corrupción, muchas recetas están sin surtir por el cambio de modelo de adquisición de medicamentos. El reporte difundido por la revista especializada señala que: “México ha sufrido una escasez continua de medicamentos contra el cáncer durante los últimos 2 años, lo que, según los expertos, es el resultado de la renovación del proceso de adquisición de medicamentos por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador. “La escasez se extiende más allá de los medicamentos contra el cáncer e incluye medicamentos como metformina, insulina y vacunas que no son COVID-19, según informes de los medios y un estudio de Cero Desabasto (Cero escasez), un colectivo de grupos no gubernamentales. “La escasez es generalizada”, dijo Andrés Castañeda Prado, médico y colaborador del estudio Cero Desabasto. “El problema comenzó antes de la pandemia y es específico de México”. Grupos no gubernamentales han documentado la escasez desde que López Obrador asumió el cargo en diciembre de 2018. Cero Desabasto investigó inicialmente si el robo de inventarios en hospitales y clínicas públicas podría explicar la escasez. La empresa obtuvo documentos públicos que muestran que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que brinda atención médica al 51% de los mexicanos, no pudo surtir alrededor del 2% de las recetas en 2019. Este valor aumentó al 8% de las recetas en 2020. “Allí Se le puso mucha atención al tema de la corrupción y fue un problema ”, dijo Castañeda Prado. "Pero el gran problema ... la gran causa de la escasez fue la ineficiencia en la gestión, la planificación y la compra". Las vacunas también disminuyeron. El número de vacunas administradas en 2020 para la tuberculosis disminuyó en un 92% en comparación con 2019, para el tétanos en un 81% y para el virus del papiloma humano en un 73%, según Cero Desabasto. Junto con la pandemia, Cero Desabasto dijo que la disminución de las vacunas "se debió principalmente a la falta de adquisición de productos biológicos por parte del gobierno". Aunque Cero Desabasto señaló la falta de oferta en el mercado mundial de vacunas contra el virus del papiloma humano, dijo que la Contraloría federal descalificó al único proveedor de algunas vacunas para vender al Gobierno. Las protestas y quejas de desabastecimiento han provocado polémica y preguntas difíciles para López Obrador. El presidente prometió resolver la escasez, pero culpó a los opositores políticos de las protestas de los padres y acusó a las compañías farmacéuticas de resistirse a los cambios en las adquisiciones. El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell —el zar del coronavirus del país— afirmó recientemente: “Vemos esta idea de niños con cáncer que no tienen medicamentos cada vez más posicionados como parte de una campaña… de grupos internacionales de derecha que buscan crear esto ola de simpatía en los mexicanos con una visión casi golpista ”. Los analistas atribuyen la escasez a la falta de planificación, a no apreciar las complejidades de la adquisición de productos farmacéuticos y a pasar por alto las dificultades de distribución. La pandemia también ha provocado una escasez de materiales. La escasez en el sistema de salud pública también está creando una mayor demanda en las farmacias, que también reportan escasez. “El problema es que este gobierno ha cancelado cosas que existían sin tener claro qué iba a hacer a continuación”, dijo Denise Tron Zuccher, abogada y coautora de un estudio sobre la escasez del grupo no gubernamental Cero Impunidad (Zero Impunidad)”. Asimismo señala que: “Según personas involucradas en la industria farmacéutica mexicana, parte del plan de López Obrador para la industria farmacéutica también era separar la distribución de productos farmacéuticos del proceso de compra. Los distribuidores dicen que separar las ventas y la distribución no es práctico ya que los laboratorios no operan redes de distribución. “El gobierno piensa en la distribución como intermediarios o cara”, dijo Carlos Ramos, director de la Asociación Nacional de Distribuidores de Insumos para la Salud. “No cree que la distribución sea un servicio necesario para mantener la eficiencia en el suministro de productos farmacéuticos o permitir la trazabilidad”. Así las cosas, las torpezas en el gobierno de López Obrador continúan llamando la atención en los espacios internacionales, sin que se haga nada al respecto. El reporte completo se puede leer en https://www.thelancet.com/journals/lancet/article/PIIS0140-6736(21)01656-1/fulltext?dgcid=raven_jbs_etoc_email Imagen: Expansión