La senadora Gina Cruz Blackledge, manifestó que la aprobación a la Ley de Hidrocarburos es ilegal, atenta contra la inversión privada y solo provocará que al ser PEMEX el mayor actor en el mercado, se incrementarán los costos y elevarán el precio de los combustibles. Durante la sesión no presencial del Senado de la República, donde se aprobó una serie de reformas a la Ley de Hidrocarburos, la legisladora por Acción Nacional presentó una reserva para que se derogue el artículo 59 Bis, el cual viola de forma abierta y lamentable el principio de certeza jurídica, al darle al Estado poderes discrecionales y al dejar a los particulares sin defensa alguna. Gina Cruz explicó que esta reforma hará que el precio de la gasolina en el país aumente, ya que, con mayor peso de un actor de mercado, en este caso de PEMEX, éste puede establecer sus propias políticas de precios y costos, lo cual evidentemente tendrá un efecto directo en un alza de precios generalizada. "Asimismo, la intención de esta reforma es que las actividades del sector hidrocarburos sean realizadas en su mayoría por PEMEX y en menor medida por privados, esto es, que los privados tendrán que pagar gastos por operación más altos y altos precios al comprar productos y servicios a PEMEX", dijo la legisladora. Gina Cruz aseveró que la reforma que el día de ayer la mayoría aprobó contra los argumentos presentados por la oposición, viola los principios de competencia y certeza jurídica y pretende garantizar el monopolio de PEMEX sobre la producción, extracción y distribución de hidrocarburos. "Se trata de un golpe directo a la iniciativa privada, ya que se le dan al gobierno facultades discrecionales para suspender, de forma retroactiva contratos y permisos, es decir vigentes, sin que los particulares cuenten con medios de impugnación suficientes", aseveró. "Además del daño a las finanzas públicas de PEMEX, la reforma no da certeza a los inversionistas y generará, en el corto y mediano plazo, mayores costos de los energéticos, los cuales o deberán ser asumidos por los particulares con daño a la economía familiar y empresarial o deberán ser subsidiados por el gobierno, con cargo a las finanzas públicas". Con esta reforma, regresamos a los tiempos de la mal entendida soberanía energética, sin participación del sector privado y ante un gobierno con recursos insuficientes para explotar los recursos naturales del subsuelo. Es de esperar que las reformas, una vez publicadas, sean impugnadas ante el Poder Judicial, expresó Gina Cruz. "La falta de garantías por parte de este Gobierno que se dan hoy día en los contratos y acuerdos, se ha traducido en una fuga de capitales sin precedentes, tan sólo en lo que va de este año han salido más de 117 mil millones de pesos. "Hay una alta incertidumbre acerca de las decisiones de este gobierno, que es alimentada día a día, como resultado de ocurrencias e improvisaciones. La visión que reflejan los cambios a la Ley de Hidrocarburos es errónea y francamente retrograda". Gina Cruz expuso que lo que hoy nuestro país requiere es mayor inversión en el sector energético, transición energética, certeza a las inversiones y garantía de que se cumplirán los contratos. Las malas decisiones en política energética nos cuestan a todas y a todos: precio alto de las gasolinas, altos costos de la electricidad y del gas; todo para defender empresas productivas que no pueden ya ser monopolios estatales, aseveró la legisladora bajacaliforniana.