Por Emmanuel Colombié Director RSF para América Latina Evaluar la implementación y efectividad de los programas de protección para los periodistas en México, Colombia, Brasil y Honduras. Este es el objetivo del proyecto lanzado este mes de abril de 2021 por la oficina de RSF en América Latina, dado que casi el 80% de los asesinatos de periodistas registrados en la región durante la última década han ocurrido en uno de estos cuatro países. La iniciativa se pone en marcha con el apoyo de la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), y debería contribuir a que se consoliden los mecanismos de protección para los reporteros que trabajan en América Latina. La Corte Interamericana de Derechos Humanos considera que el asesinato de periodistas y trabajadores de medios de comunicación constituye la forma más extrema de censura. "El ejercicio periodístico solo puede efectuarse libremente cuando las personas que lo realizan no son víctimas de amenazas ni de agresiones físicas, psíquicas o morales, u otros actos de hostigamiento", afirma la entidad. Con el fin de garantizar el ejercicio de la libertad de expresión, la Organización de los Estados Americanos (OEA) estipula que sus países miembros están obligados a prevenir la violencia contra los periodistas, a proteger a los profesionales víctimas de agresiones y a sancionar a los responsables de los crímenes cometidos contra la prensa. Cuando un Estado se halla frente a una violencia estructural contra los trabajadores de los medios, tiene la obligación de crear programas de protección. Dichos mecanismos afrontan importantes dificultades, especialmente a la hora de poner en marcha medidas efectivas para reducir los riesgos y amenazas que encaran los periodistas. Entre dichos obstáculos se cuentan la ausencia de metodologías adaptadas a la realidad del terreno, la carencia de recursos humanos y financieros, la falta de organización interna o la escasa participación de organizaciones de la sociedad civil. Por tanto, analizar las políticas de protección vigentes en México, Colombia, Brasil y Honduras, con el objetivo de mejorarlas, parece ser un paso fundamental en la defensa de la libertad de expresión y de prensa en América Latina. Con este propósito, RSF consultará a los beneficiarios de estos programas –periodistas y defensores de derechos humanos–, a sus gestores y a organizaciones de la sociedad civil activas en el campo de la libertad de expresión que sigan de cerca las políticas públicas de cada uno de estos países. Una de las líneas de esta investigación se centrará específicamente en los asuntos relacionados con la protección de las mujeres periodistas. Si bien no se encuentran entre las principales víctimas de asesinatos en la región, sí que hacen frente a una creciente cifra de asaltos y ataques, especialmente en el espacio digital. El proyecto se llevará a cabo a lo largo del año 2021 y dará lugar a una serie de reuniones y encuentros –que respetarán las medidas sanitarias impuestas por la pandemia Covid-19– en los que se presentarán una serie de recomendaciones y buenas prácticas resultantes del trabajo de investigación. RSF espera así sensibilizar a los equipos responsables de los programas de protección, periodistas, legisladores y gobiernos de México, Colombia, Brasil y Honduras sobre un problema histórico y cada vez más preocupante en la región. Brasil, Colombia, México y Honduras ocupan, respectivamente, los puestos 111º, 134º, 143º y 151º en la nueva Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2021 publicada por RSF