En su espacio con Pepe Cárdenas, Ricardo Monreal, comentó ayer sobre los discursos de odio “de la derecha, de los conservadores, de los reaccionarios, de los fascistas…”. Critica los discursos de odio, con un lenguaje de odio… Con la voz impostada de siempre, no dijo nada sobre el principal sembrador de odios del país, con quien siempre quiere quedar bien: “Tres sentimientos mueven a las personas para ir a una casilla a formarse en fila y votar por alguien o por algo: esperanza, miedo y odio. Está en curso una campaña de odio, una campaña de rencor… los especialistas en diseñar, promover y sembrar campañas de odio son la derecha, los conservadores, los reaccionarios que quieren que regrese el statu quo. El prototipo de campañas de odio, para aplicarla en cada elección, se inspira en Hitler y Benito Mussolini… Las campañas de odio tienen 3 características: Primero. Resaltan y contrastan las diferencias entre las personas por razón de sexo, religión o clase social, son discriminatorias y personalistas. Segundo. Crean el mito de la superioridad de un grupo social, por ejemplo, la supuesta superioridad de los blancos sobre los morenos, de los ricos sobre los pobres o de los que tienen trabajo sobre los que no lo tienen. Tercero. Convierten el prejuicio y la mentira en juicio y verdad, tras repetirlo y martillarlo una y otra vez. A Joseph Goebbels, propagandista nazi, se le atribuye la frase: una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. Hoy, los alumnos de Goebbels, reproducen más de 300 millones de veces un ‘hashtag’ para calumniar, difamar y mentir cuando se refieren al presidente como, ‘Narco-Presidente’. Dicen ellos, no tengo pruebas, pero tampoco tengo dudas; llegamos al punto máximo de los que se conoce como la post verdad, es decir la distorsión deliberada de la realidad o la mentira fascista en la era de la comunicación digital De eso se trata, y de eso se tratará en los próximos 100 días de esta campaña de odio, de ira, de furia, de fanatismo y, eso es preocupante porque, puede llegar a la agresión física y sería muy lamentable. Queremos una campaña alegre, emotiva, de compromisos, de respeto al adversario”, concluyó el cacique de Zacatecas. Todo lo anterior, se lo debería decir al sembrador de odios por antonomasia quien, todo indica, se inspira en Francisca Viveros, Paquita la del Barrio, para atacar con su lengua viperina a conservadores, hampa, puchos, fresas, pirrurris, chayoteros, aspiracionistas, fachos, hipócritas, canallas, zopilotes, mafiosos, mercenarios, corruptos, traidores a la patria…