Un escenario económico adverso de la cancelación del tratado de libre comercio de América del Norte (T-MEC o USMCA) entre México, Estados Unidos y Canadá tendría profundas afectaciones en la economía, particularmente, tendrá efectos adversos en las inversiones, el comercio, las exportaciones y el ciclo de la economía que estarían afectadas por la incertidumbre en la que quedaría el futuro de la economía, generando volatilidad en el tipo de cambio, que estaría alimentada por el proteccionismo. La actividad económica sufrirá, si terminara el tratado, por la pérdida de confianza de los inversionistas, a la caída de las exportaciones y el aumento de las barreras de trabajo. En 2021, las exportaciones en México crecieron un 14.46% respecto al año anterior. En 2021, las ventas al exterior representan el 38.18% de su PIB para México, por lo que se encuentra en el puesto 54 de 191 países del ranking de exportaciones respecto al PIB. Las exportaciones de bienes y servicios (% del PIB) de México se estiman en 40.4% según los datos sobre las cuentas nacionales del Banco Mundial y archivos de datos sobre cuentas nacionales de la OCDE. Si llegará a terminar el T-MEC o USMCA, aplicarían los acuerdos de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y su cláusula arancelaria de la Nación Más Favorecida (NMF). Además, en caso de que se elimine el tratado, el mayor costo para exportar a Estados Unidos se vería compensado por una apreciación del dólar frente al peso, que se prevé que ocurriría en caso de que terminara el acuerdo comercial. Entre los impactos económicos negativos se tendrían las exportaciones menos competitivas. La parte negativa de que el comercio de México y Estados Unidos se opere bajo la Norma de Nación más Favorecida, es que habrá varios sectores de la economía que serán perjudicados y las exportaciones mexicanas serán menos competitivas. En el sector industrial, se tendrían mayores aranceles que se pagarían por los exportadores mexicanos para entrar a Estados Unidos. Si las exportaciones mexicanas son gravadas con aranceles altos, se vuelven menos competitivas para los estadounidenses, quienes ante esta situación pueden optar por buscar otros mercados. De igual manera se tendrían menos inversiones si termina el tratado comercial. Uno de los beneficios que el TLCAN o NAFTA tuvo para México fue la llegada de una mayor Inversión Extranjera Directa (IED). Se estima que entre 1994 y el 2015 la IED aumentó en 75,000 millones de dólares. Como consecuencia de menores exportaciones, la llegada de menor IED e importaciones más costosas, la actividad económica sería afectada negativamente. Con la entrada en vigor del TLCAN o NAFTA se dio una integración de las cadenas de suministro entre México y Estados Unidos en algunos sectores, como el automotriz, en el que antes de que un auto esté terminado, ya cruzo ocho veces la frontera entre ambos países. Por lo que la salida del tratado comercial afectaría las cadenas de suministro. Mientras que un incremento en los precios de las importaciones de México generaría un avance mensual adicional de 1% en la inflación de México. El Fondo Monetario Internacional ya ha advertido que el proteccionismo comercial representa una amenaza para todas las regiones del mundo y para la economía global. De acuerdo con las disposiciones finales del T-MEC o USMCA, el tratado tiene una vigencia de 16 años a partir de la fecha en que entró en vigor; en este caso, el pacto comercial dio inicio el pasado 1 de julio de 2020. En el sexto año de la entrada en vigor del T-MEC o USMCA, una comisión de los países miembros se reunirá para realizar una revisión del funcionamiento del tratado y en dado caso hacer recomendaciones o adoptar medidas para su implementación futura. En esa revisión, cada parte deberá notificar por escrito si desea prorrogar el tratado por otro periodo de 16 años; en caso contrario, si uno de los países decide no continuar adelante con el pacto comercial, se procederá a hacer una revisión cada año hasta cumplir el plazo vigente del T-MEC o USMCA. Esta cláusula de vigencia y extensión fue negociada por los países a fin de mantener al margen de la política de cada país la temporalidad de un acuerdo comercial de esta magnitud. Recordemos que el presidente Donald Trump planteó la sunset clause, que limitaba la vigencia del acuerdo a 5 años con posibilidad a extenderla por otro ciclo de la misma temporalidad. No obstante, fue desechada por las comisiones negociadoras. Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SER) emitió un mensaje de certeza a los empresarios nacionales, afirmando que México no tiene intenciones de salir del T-MEC o USMCA. Cláusula de caducidad del T-MEC o USMCA: el acuerdo agrega una cláusula de caducidad de 16 años, lo que significa que los términos del acuerdo expiran, o “caducan”, después de 16 años. El acuerdo también está sujeto a una revisión cada seis años, momento en el que Estados Unidos, México y Canadá pueden decidir extender el T-MEC o USMCA. ****Economista internacional y profesor investigador de El Colef.