Existe un dicho que dice “el ser humano es el único animal que se tropieza dos veces con la misma piedra” y añadiríamos a este dicho que si es mexicano nunca aprenderá. Drástica observación, pero tristemente cierta, lo estamos viviendo en esta época de pandemia cuando en México estamos cometiendo los mismos errores y además cometemos los que atestiguamos que otros cometieron. En esta pandemia son acciones que ya realizamos, que salieron mal y las seguimos realizando, reuniones multitudinarias, olvidar la sana distancia, no uso de cubre bocas, por mencionar algunas, que al no ejercerlas provocaron el aumento de contagios, de nuevo están en aumento los enfermos y la gente en general no aprende, vamos por la tercera ola. En otros países más desarrollados que nosotros permitieron las reuniones multitudinarias y hasta abrieron las escuelas, resultado, aumentaron los contagios y muertes por covid, y nos referimos a Japón, USA, Alemania por citar unos ejemplos, ante esto ¿por qué nosotros no tomamos la experiencia y no cometemos el mismo error? Las estadísticas muestran que algo no está bien, que estamos actuando mal ya que los enfermos aumentan; las acciones y libertades que otros aplicaron resultaron mal, seria inteligente y conveniente hacer algo diferente a esas acciones que claramente aplicaron otros y que a nosotros nos resultaran mal, pero, no, seguimos cometiendo los mismos errores y además los que otros cometieron a pesar que está comprobado el error. En Mexicali es común encontrarnos gente que no usa cubre bocas y no respeta la sana distancia, aun con los anuncios, avisos que, de forma escrita, gráfica y por sonido nos están recordando y avisando que debemos cuidarnos. No solo es culpa de las autoridades la población debe de madurar y ser consciente de su propio cuidado, de procurar su bienestar, pero… ya viene las fiestas del sol, el chevefest… Por lo pronto estamos enfrentando la tercera ola que nos llegó después que a otros y lo más probable es que llegarán una cuarta y quien sabe cuántas más, en una de esas nos llega un tsunami y desaparecemos por animales que no aprenden a no tropezarse otra vez con la misma piedra, bien dice otro dicho, “quien no conoce la historia está condenado a repetirla” y vaya que hay sin fin de ejemplos de ello.